Arquetipos

El Camino del Maestro Borracho enseña a sus estudiantes a moverse de forma errática e impredecible, como un borracho. Un maestro borracho se balancea, tambaleándose sobre sus piernas inestables y presentando un oponente aparentemente incompetente, pero frustrante en combate.

Estos monjes consideran que su ki es una representación de su verdadera forma, el yo astral; puede ser tanto fuerza del orden como del caos.

Has dedicado tu vida a cazar criaturas de la noche y usuarios de magia oscura. Un Cazador de Monstruos busca vampiros, dragones, feéricos malvados, infernales y otras amenazas mágicas. Entrenado en técnicas sobrenaturales que le permiten imponerse a estos monstruos.

Los druidas de este círculo tienen una relación compleja con los no muertos. No ven nada intrínsecante malo en la no muerte, pero creen que el siclo natural es más saludable cuando cada segmento es vibrante y cambiante.

Estos druidas llevan estudiando los patrones celestiales desde tiempos inmemoriales, descubriendo los secretos ocultos entre las constelaciones. Al desvelar y comprender estos secretos, el Circulo de las Estrellas pretende controlar los poderes del Cosmos.

Canalizas poder a través de máscaras místicas, adoptando distintas formas con habilidades únicas. Inspirado en el teatro y la naturaleza, combinas conjuros, armas y trucos para luchar con estilo, cambiar de máscara en combate y fortalecer a tus aliados con tu actuación.

Los miembros del Círculo de los Sueños vienen de regiones con fuertes lazos con el Feywild y sus reinos de ensueño. La vigilancia del mundo natural que llevan a cabo los druidas hace que se forme una alianza natural entre ellos y los feéricos buenos.

Estos druidas comprenden que, a veces, la destrucción es la precursora de la creación, como cuando un incendio forestal favorece el crecimiento posterior. Estos druidas se vinculan a un espíritu primigenio que alberga poder tanto destructor como creador, lo que les permite crear llamas controladoras

Los druidas del Círculo de las Pesadillas caminan entre el mundo material y el reino de los sueños. Canalizan sombras vivas, invocan bestias oníricas y distorsionan la realidad. Maestros de lo intangible, usan el poder del subconsciente para proteger, confundir y aterrorizar.

Los druidas del Círculo del Pastor se encuentran en comunión con los espíritus de la naturaleza, especialmente con los de las bestias y los feéricos, a los que recurren en busca de auxilio. Estos druidas entienden que todos los seres vivos cumplen un papel en el mundo natural.

Algunos bardos encuentran inspiración en el sonido de los dados rodando, el tintineo de las monedas y la adrenalina del todo o nada. El Colegio de la codicia ve la vida como una gran apuesta, pues estos bardos son los reyes del riesgo, manipulando el destino a su favor... o enfrentando su furia.

Los bardos consideran que el cosmos es una obra de arte, la creación de los primeros dioses y dragones. En este trabajo creativo se incluyeron armonías que aún siguen resonando hoy, un poder conocido como Cancion de la Creación. Los bardos del Colegio de la Creación se inspiran de esta canción.

Los integrantes del Colegio de la Elocuencia dominan el arte de la oratoria. Estos bardos mezclan la lógica con una oratoria de estilo teatral. Con esta combinación, se ganan a escépticos y detractores con argumentos lógicos y apelan a la fibra sensible del público para que afloren sus emociones.

Los bardos del Colegio de la Tragedia dominan relatos tristes, usando palabras y magia para provocar efectos dramáticos y devastadores.

Los bardos del Colegio de las Espadas reciben el nombre de filos, ya que entretienen con osadas proezas de pericia en armas. Realizan interpretaciones tales como combates fingidos, tragarse sables, lanzamiento de cuchillos o malabares con dagas.

Estos bardos buscan relatos con un poder inherente y hacen que los temas que tratan cobren vida. Mediante símbolos místicos conjuran encarnaciones espirituales de fuerzas poderosas para volver a cambiar el mundo. Sin embargo, se trata de espíritus caprichosos, por no siempre bajo su control.

El Colegio de los Susurros entrena bardos que ocultan su verdadera naturaleza tras canciones y relatos. Usan secretos para extorsionar y manipular, ganando poder y riqueza. Despreciados por otros bardos, suelen fingir pertenecer a otro colegio para infiltrarse en cortes y círculos de influencia.

El Colegio del Glamour es el hogar de aquellos bardos que han afinado su habilidad en el vibrante reino del Feywild o bajo la tutela de alguien que vivió allí. Con sátiros, eladrines y otros feéricos como profesores, estos aventureros aprenden a usar su magia para cautivar.

Se trata de magos que dominan una escuela de esgrima basada en una tradición de magia arcana. Durante el combate, un danzacombatiente usa una serie de maniobras intrincadas y elegantes para eludir el daño y canalizar su magia en ataques arrasadores y en una defensa ingeniosa

Los Defensores Rúnicos son escuderos que forjan un vínculo místico con sus escudos imbuidos de antiguas runas protectoras.

El dominio de la comunidad se enfoca en los lazos que unen a todas las personas. Estos son los lazos de familia y amistad, los lazos con los ancestros, así como los lazos entre los ancianos y la próxima generación con quienes comparten su sabiduría.

Los dioses de la forja guían a artesanos, enseñando que con paciencia cualquier metal puede transformarse. Sus clérigos buscan artefactos perdidos y minerales raros, y usan armaduras y armas para proteger su obra.

La noche es misteriosa y oculta muchos peligros invisibles. Sin embargo, el cobijo de la oscuridad también brinda protección contra depredadores y sombras dentro de las cuales uno puede ocultarse.

Estos presiden la firma de tratados y se les suele pedir que medien cuando hay conflictos. Las bendiciones de estos clérigos sirven para unir a las personas y las impulsa a que se socorran unas a otras, y su magia ayuda a aquellos que decididos a luchar para conseguir la paz.

Los dioses de la sepultura vigilan la línea entre la vida y la muerte. Para estas deidades, la muerte y el más allá son parte fundamental del universo. Romper la paz de los muertos es una abominación.