Arquetipos

Te enfocas en el sombrío arte de la muerte. Aquellos que siguen este arquetipo son diversos: asesinos a sueldo, espías, cazadores de recompensas e incluso sacerdotes especialmente ungidos entrenados para exterminar a los enemigos de su deidad.

Para algunos guerreros, la furia es un medio para un fin: ese fin siendo la violencia. El Camino del Berserker es un camino de furia desenfrenada, teñido de sangre. Al entrar en la furia del Berserker, encuentras éxtasis en el caos de la batalla, sin preocuparte por tu salud o bienestar.

Como Encantador Caballero, has adquirido la habilidad de manipular el Velo (*Fade*) a tu favor. Con este poder, puedes invocar armas aparentemente de la nada, emulando las habilidades de Guerreros y Pícaros, impulsadas por tu magia.

El poder de un Cambiaformas radica en el arte de la transformación. Para adaptarte a cualquier batalla o terreno complicado, eres capaz de asumir la forma de animales, ya sea la de una rata para deslizarte por espacios estrechos o la de un oso para imponerte sobre tus enemigos.

Te enfocas en el arte de la espada, confiando en la velocidad, la elegancia y el carisma en partes iguales. Mientras que algunos guerreros son brutos con armaduras pesadas, tu método de combate parece casi una actuación.

Los principios de la resistencia están en el centro de la magia de cualquier Sanador Espiritual, a menudo permaneciendo en el fondo para sostener y restaurar. Curando las heridas de tus aliados, formas la base que les permite continuar la batalla.

Cuando un Guardián entra al campo de batalla, su propósito es claro: proteger, incluso si significa recibir el golpe por otro.

Un Mago de la Fuerza elige trabajar con la herramienta más poderosa que siempre tiene a su disposición: la mente. Utilizando una rigurosa precisión, manipulas energéticamente los espacios que ocupas, obteniendo la capacidad de ralentizar, aplastar y lanzar a tus enemigos en el campo de batalla.

Pocas cosas inspiran más terror que la aparición de un Mago de Sangre en el campo de batalla. Manipulas y controlas el poder de la vida que impulsa cada alma y cuerpo en Thedas, usando este poder para crear cosas tanto horripilantes como increíbles.

Un Reaver elige obtener poder de la sangre, ya sea la suya o la de sus enemigos, convirtiéndose en una fuerza temible. Luchas con más fuerza cuando estás gravemente herido, aceptando el alto riesgo que conlleva este estilo a cambio de la capacidad de aterrorizar a tus enemigos en el campo de batalla

Perfeccionas tus habilidades en las artes del robo. Ladrones, bandidos, carteristas y otros criminales suelen seguir este arquetipo, pero también lo hacen pícaros que prefieren considerarse buscadores de tesoros profesionales, exploradores, investigadores de ruinas antiguas o investigadores.

Los Tempestades son Pícaros que han buscado canalizar efectos mágicos en elixires y pociones. Ya sea para invocar fuego o hielo, los Tempestades usan sus habilidades alquímicas para volverse más resistentes o más devastadores en combate.

Como templario, te has dedicado a la causa de proteger a los inocentes de la magia y, como parte de la *Capilla*, muchos te consideran un servidor justo de Andraste.

Algunos Pícaros buscan dominar las armas de largo alcance para proteger mejor a la civilización de los terrores de la naturaleza salvaje.