Rompejuramento

Un dracónido en una armadura dorada salpicada de sangre contempla el cuerpo sin vida de su mentor y saca su espada de su espalda, sus ojos reptilianos fríos y despiadados. Un humano pálido y demacrado en armadura negra se recuesta en su trono adornado con calaveras y levanta una mano, convocando a sus sirvientes esqueléticos para asolar las tierras que una vez protegió. Un medio elfo se sienta solemnemente sobre su corcel en llamas y se pregunta sombríamente cómo todo salió tan mal. Un paladín que no cumple los principios de su juramento por debilidad moral perderá los poderes divinos concedidos, y tal vez sea expulsado de su orden, pero algunos paladines no simplemente fallan: caen. Ya sea que sean golpeados por una crisis de fe o tentados por poderes oscuros, estos paladines se convierten dramáticamente de campeones de la justicia a portadores de destrucción y opresión. Se convierten en anatema a todo lo que una vez amaron. Se convierten en Rompejuramento.

Campeones Caídos

Aunque algunos de los que poseen los poderes del rompejuramento siempre han estado corruptos hasta la médula, los rompejuramentos en su sentido más genuino deben ser antiguos héroes de la fe o vengadores sagrados. Se dice que aquellos con la convicción más profunda en su juramento caen más duramente, ya que la pérdida de un aspecto tan fundamental de su identidad conlleva un profundo trauma psíquico que remodela quiénes son.

Guerreros del Mal

Los paladines son conocidos por su destreza marcial y su determinación inquebrantable, y los rompejuramentos conservan estos rasgos, aunque retorcidos. Estos guerreros anhelan un propósito, y con su antigua causa manchada y cerrada a sus ojos, se aferran igualmente a causas más viles. Algunos se sienten atraídos por el abrazo de poderes oscuros, como demonios o dioses malévolos; otros continúan creyéndose en lo correcto y persiguen sus propias formas de justicia retorcida.

Creando un Rompejuramento

El primer paso para crear un rompejuramento es crear al paladín que alguna vez fueron. Considera la naturaleza de tu búsqueda sagrada, qué te llevó a emprenderla y qué calamidad te llevó a romper con ella tan completamente. ¿Eras un devoto fiel de un orden justo que vio corrupción detrás de los ideales en los que creías, y caíste en la corrupción al intentar erradicarla? ¿Llegaste a extremos en la persecución de la erradicación del mal que cuando el polvo se asentó y la bruma de sangre se disipó, tus oraciones ya no fueron escuchadas? ¿Fuerzas oscuras sembraron una semilla de duda en tu mente que fermentó y creció, llevándote inexorablemente hacia su abrazo condenatorio?

¿Cuál es la naturaleza de la oscuridad que utilizas? ¿Has asumido el servicio de dioses oscuros o archidemonios, por elección propia o a través de dominación y coerción? ¿Recurre a la necromancia maldita para mantenerte fuerte, relacionándote con espíritus malditos y levantando hordas de no muertos propias? ¿O es tu poder innato e inexplicable, resultado de una corrupción que siempre ha acechado dentro de ti, o tal vez resultado del violento trauma mágico al romper tu juramento sagrado?

Considera también tu alineación: ¿eres un malvado legal imperioso, un malvado caótico destructivo o un malvado neutral egoísta? ¿Realmente has abrazado el mal, o eres más neutral, un vagabundo en busca de significado para llenar el vacío dejado por tu convicción anterior? ¿Existe aún una chispa de bondad dentro de ti, quizás anhelando una oportunidad de redención, incluso si temes que sea demasiado tarde? Quizás ya estás en ese camino, pero las circunstancias te obligan a recurrir al poder oscuro que condena tu alma para proteger a otros.

Equipo

Comienzas con el siguiente equipo, además del equipo otorgado por tu trasfondo:

• (a) un arma marcial y un escudo o (b) dos armas marciales

• (a) cinco jabalinas o (b) cualquier arma simple de combate cuerpo a cuerpo

• (a) un equipo de sacerdote o (b) un equipo de explorador Cota de malla y un símbolo impío

Créditos del arte a fadly_romdhani