Mazludeh
Origen: La Extensión de Mwangi
Categoría: Clérigo / Dios
Nivel necesario: 1
Adquisición: Selección
Madre del hogar y el muro
- Áreas de interés comunidad, crepúsculo, equilibrio, negociación
- Alineamiento NB (LB, NB, CB)
- Fuente divina curar
- Habilidad divina Diplomacia
- Aptitud divina Sabiduría o Carisma
- Dominios ciudades, conocimiento, familia, perfección
- Dominios alternativos deber, Naturaleza
- Conjuros de clérigo 1.er: Acceso al saber, 4.º: Moldear la piedra, 5.º: Muro de piedra
- Edictos buscar la mejora de uno mismo y de su comunidad, confiar en aquellos con los que trabaja, fomentar la cooperación
- Anatemas poner el conflicto entre las diferencias ideológicas por encima de la vida de las personas, traicionar la confianza de otro
- Arma predilecta umbo de escudo
Avatar
Al lanzar el conjuro avatar, un adorador de Mazludeh obtiene las siguientes aptitudes adicionales.
Mazludeh Velocidad 70 pies (21 m), trepar 50 pies (15 m), escudo (dureza 15, no puede resultar dañado); Cuerpo a cuerpo golpe de víbora (alcance 15 pies [4,5 m]), Daño 6d10+6 perforante; A distancia lluvia de piedras (alcance 120 pies [36 m]), Daño 6d6+3 contundente.
Mazludeh era antaño una de los muchos Señores Empíreos, responsable de los dominios de la administración de la comunidad y el sacrificio amoroso. Sin embargo, sus acciones durante la Gran Caída y la Era de la Oscuridad salvaron incontables vidas en Mwangi. Consternada por el caos y la pérdida de vidas, Mazludeh incitó a sus compañeros Señores Empíreos a actuar, formando una concordancia divina que protegió a la nación garundi de Holomog de la devastación. Los esfuerzos de Mazludeh la elevaron a la verdadera divinidad y al estatus de diosa matrona de la nación de Holomog. Ahora es la diosa de las negociaciones y los tratados y sus seguidores suelen viajar con comerciantes y embajadores. También se la considera la diplomática de los demás Señores Empíreos, capaz de transmitir las plegarias a los más adecuados para responderlas y de persuadir a los seres celestiales para que las cumplan. En todo Mwangi, los adoradores de Mazludeh han desarrollado una reputación de ser valientes, empáticos y justos incluso con sus enemigos.
Con el paso de los años, cada vez es más habitual que las comunidades mwangi rindan homenaje a Mazludeh, especialmente cuando construyen nuevas casas y asentamientos, aunque todavía es poco frecuente un culto más estructurado. Mazludeh ve el amor y el cuidado en todas las comunidades de Mwangi y les ofrece toda la protección que puede. Incluso antes de su presencia allí, muchos edictos de su fe eran ya una práctica común, que se espera de cualquier miembro que contribuya a la sociedad. Por tanto, los nuevos fieles de Mazludeh debían cambiar muy poco su forma de vida.
A menudo se representa a Mazludeh como una serpiente gigante con una melena de huevos e higos frescos, o como una mujer con serpientes por pelo. Los estudiosos debaten mucho sobre el significado de esta doble naturaleza, pero la mayoría está de acuerdo en que su divinidad es probablemente anterior a los humanos y que éstos la adoptaron más tarde. A diferencia de su culto en otras partes del mundo, los habitantes de Mwangi tienden a abrazar la dualidad de Mazludeh. Negar cualquiera de sus lados sería negar una parte de ella y ambos son necesarios para comprender plenamente a la diosa. Para ellos, representa no sólo la unidad con los vecinos, sino la unidad y la coexistencia con la naturaleza. Vivir en equilibrio con los alimentos que se cultivan, los animales que se cazan y la tierra en la que se vive es tan importante como lo que ocurre entre los muros de un hogar.