Dominio: Serpiente Emplumada

Los clérigos que siguen el Dominio de Quetzalcóatl son devotos del dios del viento, la sabiduría y la vida. Como servidores de la Serpiente Emplumada, estos clérigos actúan como intermediarios entre Quetzalcóatl y la humanidad, canalizando su poder para proteger a los inocentes, castigar a los malvados y mantener el equilibrio en el mundo.

El Dominio de Quetzalcóatl otorga a sus seguidores acceso a poderosos conjuros de viento y clima, así como la capacidad de protegerse y a los demás con la fuerza divina del dios. Estos clérigos pueden invocar poderosos vientos para derribar a sus enemigos, volar por los cielos y controlar el clima a su voluntad.

Además, la sabiduría de Quetzalcóatl les permite tomar decisiones sabias y justas, guiando a sus compañeros con conocimiento ancestral. Con el favor de la Serpiente Emplumada, estos clérigos se convierten en faros de esperanza y estabilidad, restaurando el orden y trayendo la paz donde más se necesita.

Los clérigos del Dominio de Quetzalcóatl son líderes naturales, maestros del conocimiento y defensores de la justicia, siempre buscando mantener el equilibrio y cumplir con los designios de su dios. Son respetados y temidos, pues su poder no solo reside en la fuerza del viento, sino en la sabiduría y la determinación de Quetzalcóatl.