Keledone

Constructo Mediano, Sin alineamiento
Los keledones son construcciones doradas creadas por los dioses para que se parezcan a hermosas mujeres con grandes alas brillantes. Estos autómatas existen para servir a sus creadores con una lealtad inquebrantable, a veces mucho después de la destrucción de su creador. Algunos mortales pueden confundir a los keledones con diosas debido a sus formas perfectas y su inmutabilidad eterna. Los keledones tienden a tener disposiciones serenas. No se inmutan ni siquiera ante las amenazas más temibles.
Melodías encantadoras. La mayor arma de un keledón es su magnífica voz, que tiene el poder de evocar tanto un consuelo reconfortante como una desesperación inquietante en todos los que la escuchan. Una de sus canciones desentierra e intensifica los recuerdos más tristes del oyente, lo que puede quebrantar la psique de aquellos con menor voluntad. Otra melodía arrulla a los agresores de un keledón en un sueño profundo. Dependiendo de la gravedad de la transgresión de su víctima, un keledone puede continuar con su canción somnolienta el tiempo suficiente para que su objetivo muera de deshidratación. Sin embargo, los keledone no solo usan sus canciones con fines ofensivos; se sabe que otorgan calma y paz a las mentes de los suplicantes mortales atribulados.
Guardianes celestiales. Los keledone a menudo tienen la tarea de proteger lugares sagrados, como templos, necrópolis y otros lugares que son importantes para sus creadores. Algunos incluso han sido incorporados a las paredes de sus cargas. A diferencia de los autómatas menores, los keledone no necesitan mantenimiento para continuar con sus tareas. Muchos keledone han estado de guardia durante milenios, completamente intactos por el tiempo. A un keledone se le puede ordenar que mantenga alejados a los intrusos usando fuerza letal, mientras que otros simplemente garantizan la seguridad de sus cargas. Algunos keledone tienen la tarea de poner a prueba a los aventureros, asegurándose de que solo los fuertes puedan seguir adelante para encontrar el conocimiento o el tesoro que buscan.
Voluntad mecánica. Los keledone son construcciones inteligentes imbuidas de una conciencia de sí mismos que es poco común entre los autómatas. Aunque no es un rasgo inherente, los keledone pueden desarrollar personalidades o identidades distintas a lo largo de los siglos. Este fenómeno ocurre con mayor frecuencia en los keledone que interactúan frecuentemente con otros seres, ya sean otras construcciones inteligentes, criaturas sobrenaturales o simples mortales. Sin embargo, a pesar de su individualidad, es extremadamente raro que un keledone eluda sus deberes o abandone su puesto. Aquellos que lo hacen descubren que la magia que los sostiene comenzará a desvanecerse. Un keledone desleal pierde rápidamente su capacidad de volar, ya que sus pesadas alas de metal se vuelven incapaces de soportar el peso de su sólida estructura de oro.
Origen: Odisea de los Señores Dragón [Odyssey of the dragonlords]
Categoría: Monstruo
Clase de armadura: 16 (natural)
Iniciativa: +1
Puntos de Golpe: 90 (12d8+36)
Valor de desafío: 7 (2.900 PX)
Velocidad: 30 pies, 60 pies volando
| Fue | Des | Con | Int | Sab | Car |
|---|---|---|---|---|---|
| 10 (+0) | 12 (+1) | 16 (+3) | 11 (+0) | 10 (+0) | 10 (+0) |
Sentidos: Visión en la oscuridad 120 pies, Percepción pasiva 10
Idiomas: Común, celestial
Resistencias al daño: Fuego, frío
Inmunidades al daño: Rayo, veneno, psíquico
Inmunidades a estados: encantado, exhausto, asustado, paralizado, petrificado, envenenado
Rasgos
Forma inmutable. El keledone es inmune a cualquier hechizo o efecto que pueda alterar su forma.
Resistencia mágica. El keledone tiene ventaja en las tiradas de salvación contra hechizos y otros efectos mágicos.
Acciones
Canción del dolor. La keledone canta una canción de desesperación. Cada criatura a 20 pies de ella que pueda oírla y que no sea un constructo debe superar una tirada de salvación de Sabiduría CD 14, recibiendo 28 (8d6) puntos de daño psíquico si falla la tirada, o la mitad si tiene éxito.
Canción del sueño. La keledone canta una canción para adormecer a sus enemigos. Cada criatura a 20 pies de ella que pueda oírla y que no sea un constructo debe superar una tirada de salvación de Sabiduría CD 14. Si falla la tirada, la criatura queda inconsciente durante un minuto (o hasta que reciba daño u otra criatura realice una acción para despertarla).