Leyenda Demoniaca del Monte Oee

En realidad, Ibaraki-douji no es una subordinada de Shuten-douji, sino que se cree que existió como «la cabecilla de los oni del Monte Ooe». Ibuki-douji, que nació del Gran Dios Ibuki del Monte Ibuki, es decir, Yamata no Orochi; y una humana. En otras palabras: Shuten-douji. De hecho, solo era apropiado que Abe no Seimei, una autoridad del antiguo Kyoto, prestara atención a tal ser. Sin embargo, la que realmente lideraba a los oni del Monte Ooe no era otra que Ibaraki-douji.

A pesar de ser una existencia poderosa, la fuerte pero extremadamente buscadora de placer Shuten-douji no tenía ni un poco de interés en comandar el enjambre de oni ella misma. En lo que respecta a Shuten, la única que podía liderar el enjambre oni que estaba siendo atraída a su posición como «maestra que controla la montaña» era su igual, Ibaraki-douji, y ningún otro.

Quien erigió un palacio solemnemente majestuoso en el Monte Ooe, quien había apreciado el placer de buscar a Shuten-douji como su «hermana jurada criada junto a ella», quien había comandado un grupo de oni que eran individualmente un combate para mil guerreros, y quien había ejercido la tiranía sobre el antiguo Kyoto, había sido la misma Ibaraki-douji; una «oni furiosa» que había hecho caer al pueblo en las profundidades del terror.

El estatus de Ibaraki-douji como un oni está muy bien clasificado; una comandante aguda y feroz cuyo punto fuerte es la guerra de guerrillas. Si uno lo piensa, junto con su ejército de oni, Ibaraki debería haber aplastado cualquier tipo de fuerza humana, incluso si se trata de Raikou y sus Cuatro Reyes Celestiales − o al menos eso es lo que ella pensaba −. Lo único que derribó la fortaleza de Ibaraki-douji no fue otra cosa que el placer de Shuten-douji, su hermana jurada a quien debería amar más que a nadie. Para hablar con Sakata Kintoki, Shuten había guiado a Raikou y a los Cuatro Reyes Celestiales a su fortaleza, e incluso sabiendo que era veneno, había bebido el Veneno Providencial de Oni que fue el colmo del placer para ella. E Ibaraki-douji no pudo detenerla.

La única sobreviviente de los oni del Monte Ooe, Ibaraki-douji atacó a Watanabe no Tsuna en el Rashoumon − o quizá sobre el puente de Ichijou-modoribashi − en la Capital Imperial y terminó con su brazo cortado. Si bien dicho brazo fue temporalmente arrebatado como botín de guerra, Ibaraki-douji se las arregló para recuperarlo más tarde y luego desapareció en algún lugar.

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