Servidor de la Hegemonía de Hierro

Servidor de la Hegemonía de Hierro

En muchos territorios de La Garra, especialmente en aquellos gobernados por la Hegemonía de Hierro o por señores afines a ella, los jóvenes son educados en el servicio al país y a Arather como rito de paso para ser considerados adultos. Durante este periodo se les conoce como «servidores de la Hegemonía» y desempeñan roles de lo más variado a las órdenes de sus superiores: desde escudero o recluta del ejército hasta aprendiz de herrero en las forjas enanas, pasando por acólito en un templo o en una universidad.

  Origen: El Espolón

  Competencia con habilidades. Historia y Religión

  Competencia con equipo del trasfondo. Herramientas de artesano

Crear personaje Servidor de la Hegemonía de Hierro

Tus años de servidumbre en la Hegemonía te han granjeado un buen número de amistades y cierto renombre entre los miembros de la Hegemonía u otros devotos de Arather. Allí donde vayas puedes encontrarte sacerdotes, nobles, herreros o sargentos de la Hegemonía en buenos términos con tu señor o sencillamente dispuestos a ayudar a un camarada en apuros. Lo mismo puede ocurrir en los templos de Arather, donde los siervos de la Hegemonía son vistos como abnegados fieles, dignos de ayuda y bendiciones.

Características sugeridas

Aquellos criados como servidores por la Hegemonía suelen ser personas con estudios, capaces de desempeñar una tarea y formar parte del gran engranaje que es la sociedad. La fe en Arather es un pilar básico de su carácter, aunque en ocasiones esto les provoca conflictos o problemas sociales con otras culturas o incluso con sus propios señores.
  1. No exijo a los demás seguir las leyes de Arather, pero interiormente desprecio a quien no lo hace.
  2. No temo mostrar mi fe a los demás y no cederé a esconderla por nada.
  3. Aquellos que demuestran disciplina tienen asegurada mi simpatía.
  4. He visto cometer atrocidades en nombre de la ley y considero que esta debe ser flexible y mesurada.
  5. Mis armas son un espejo de mi alma, por eso siempre cambio su decoración y les impongo mi estilo.
  6. Antes de dormir, siempre reflexiono sobre algún pasaje de las tablillas de Ulroënce. A poder ser, en voz alta y con mis compañeros.
  7. Desconfío de quien hace alarde de su fe. Aquellos que más levantan la voz suelen ser los que peores pecados guardan.
  8. La roca, el ladrillo y el metal forman mi hogar. Los espacios salvajes me perturban.
  1. Poder. Es mi obligación ascender y liderar a mis semejantes (legal).
  2. Superación. La vida es proponerse desafíos y superarlos para ser cada día mejor (neutral).
  3. Prosperidad. Los descubrimientos, la invención
  4. y la investigación son los engranajes que llevan al mundo hacia un futuro mejor (bueno).
  5. Conquista. La gloria y el orgullo de la Hegemonía
  6. y del pueblo del río debe expandirse sobre otros pueblos, pues así lo quiere Arather (maligno).
  7. Justicia. Las leyes emanan de la sabiduría de nuestro divino señor y la Hegemonía de Hierro, y son la única barrera ante el olvido eterno (legal).
  8. Venganza. La justicia también implica dañar a aquellos que nos han dañado (cualquiera).
  1. Estoy investigando la historia antigua para conocer el origen de mi dios.
  2. Es mi obligación expandir los dogmas sagrados a aquellos que los desconocen.
  3. Debo evitar que los malvados acaben con vidas inocentes, incluso si son compatriotas míos.
  4. Solo el fuego de la vida me permitirá volver a casa fuerte y libre de impurezas.
  5. He jurado ante el cuerpo en llamas de la Profetisa luchar hasta el fin por el pueblo del río y la Hegemonía de Hierro.
  6. Debo dar caza a aquellos que robaron los secretos de la Hegemonía de Hierro.
  1. Algunos altos cargos de la Iglesia consideran hereje mi manera de entender la religión.
  2. Pese a mi total devoción, los demás ponen en duda mi fe por mi origen extranjero.
  3. Durante mi época como servidor me gané la profunda enemistad de los rivales de mi señor.
  4. Llevo conmigo las marcas físicas de mis pecados.
  5. Presenciar pecados o herejías hace que me hierva la sangre y puedo perder el control.
  6. Aún debo lealtad a un señor que puede reclamar mis servicios en cualquier momento.